A Casa recibió el mes de junio un regalo muy significativo. Josep Rius Pérez y Susana Calpe Arnandis donaron una pieza de olivo centenario llamada «La Vida«. Recordamos que simboliza la aparición de todo, con el ser humano como centro, desarrollándose y degradándose al final de su tiempo.
Es un homenaje a los árboles que tanto admiraba José Saramago y un reconocimiento a la madera de La Plana de Castellón.
“A esos árboles que nos han dado y nos darán vida”
Y éste es el lugar que ocupa en nuestra Casa Museo, la entrada a la Biblioteca, junto al banco en el que tantas veces se sentara el Premio Nobel.
José Saramago observa en el mismo lugar el olivo del Alentejo presidiendo su Biblioteca. ¿Cómo llegó? En un avión de pasajeros, en una maceta entre sus piernas. No sabía si se podría alimentar de tierra volcánica pero lo consiguió. Testimonio del amor que el escritor portugués por este árbol siempre manifestó. Representa al Complejo Cultural A Casa (símbolo de paz y sabiduría).